EL SABOR DEL AMOR

 



No pudiera yo afirmar
al paladear el amor
que no tuviera sabor
esa experiencia sin par.
También pudiera aclarar
que si amar fuera pintura,
la blanca, que es la más pura,
pudiera representarlo
y al que quiera así pintarlo
no tacharán de locura.

Joaquín Pérez de la Blanca y Vida.
18-diciembre-2007.

 

 

 

 

 

 

 

 

VOLVER