COMO LAS OLAS...

 

 

 

Como las olas que con su rigor
baten las duras rocas por oriente,
vas horadando con hervor doliente,
mi corazón, ya próximo al angor.

Esta alma sufre con tenaz rigor,
por el embate seco en el rompiente,
que ya se muestra en el precoz poniente
y va perdiendo raudo su fulgor.

Tus olas tienen crestas con espuma
falsa, de blanco su color teñido
en negro, como el centro de la bruma.

Ese campano tuyo sin bruñido
y en sinrazón hundido, que te abruma,
lo llevarás por siempre a ti ceñido.




Carlos
29 de agosto de 2007.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

VOLVER