La noche gélida
con su manto de estrellas
lo cubre todo.
Luces que la calle alumbran,
hacen picarescas sombras
al paso del artista.
Su destino es el café,
donde entre chistes y alegría
a todos alegrará el día.
Habla, hace bromas,
escribe citas en un papel,
sonríe, parece contento.
Por dentro esta llorando.
Alguna vez mira la puerta
con el corazón acelerado.
Ve entrar a su vida,
pero pronto advierte,
que se ha equivocado.
¡Ella no volverá nunca!
Tuvo una ilusión.
amó un sueño
que se fue, ahora tiene
el corazón destrozado.
Efímero momento feliz
con su diosa adorada
que ya no está.
Ancestro del dolor
fue la pasión.
Ya no queda nada.
Has de reír
porque eres artista.
Has de sufrir
porque amaste, sigues amando.
Has de mostrarte feliz
aunque estés penando.
No has de mirar la puerta,
que tu sueño se ha perdido.
Has de dejar de amar
y vivir con tu vacío.
Al-campoamor.