A MIS HERMANOS PERUANOS

 

 

 

 

 

 

 

 

Hoy siento solo ganas de llorar.
Hoy circula tristeza por mis venas.
Hoy no puedo ver rosas ni azucenas,
sintiendome de pena agonizar.

¡Horror, espanto, angustia al contemplar
sufrir a un pueblo hermano con sus penas,
objeto del pavor, rotas sus quenas,
a causa símplemente del azar!

Solo puedo gritar con amargura,
con rugido de rabia contenida,
que siento como mía su tortura.

Y bramo con el alma desabrida
pidiendo a Dios dé fin a esta pavura
y ayude al alma inca desvalida.

 

© Antonio Pardal Rivas
18-08-07

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

VOLVER