LO QUE EL TIEMPO SE LLEVA


 


Al barrio de Capuchinos, con nostalgia.


He caminado expectante por mi antiguo barrio
después de años de ausencia forzada
por las circunstancias y el devenir inesperado,
muy a mi pesar y sin clemencia.

He recordado nuestros paseos cansinos y lentos,
breves en el tiempo y en la intensidad,
junto a las flores de la redonda plaza
que preside solemne una Inmaculada
frente a un cuartel de soldados ociosos,
y al otro lado, una farmacia
donde mis pocos años prestaban sus servicios
cargados de ilusión.

Evocando nuestro ayer esplendoroso y feliz,
henchido de esperanza y amor,
que luego fracasaron sin saber porqué,
me ha dolido el alma.
pero a pesar de todo, he seguido mis pasos
a través de sus calles,
porque aquellos momentos no los puedo olvidar
aunque estén mitigados por el paso del tiempo.

Ha cambiado mi barrio, su figura y la gente,
ya no conozco a nadie,
soy un extraño en el que fue mi mundo,
y ella hace tiempo que del barrio está ausente.
Ni un sólo amigo a quien buscar pueda
para que me acompañe, me cuente y me recuerde
los juegos y los amores de nuestra pubertad,
y en banco de madera de la querida plaza
sentado a horcajadas, mirando alrededor,
he visto con nostalgia que ya nada es igual.

Ni el colegio en que entonces cursaba mis estudios
ocupa las aceras que tanto recorrí,
ni la pendiente calle que pesado subía
es la misma de entonces desde que ella no está.
La Imagen de mármol blanquecino, me mira
diciéndome en silencio que no podré encontrar
lo que con ansia busco; que ya todo pasó.
En vano me aferro a mi inconformismo,
ya, incluso el cuartel tiene otra misión.
Sólo la escalinata que suave te conduce
a la bonita Iglesia, era tal como está.

Me he dado por vencido, y he vuelto
con mis nuevos amigos y mi gran nuevo amor,
con mi casa y mis hijas, a quien les he contado
que un día fuí feliz en aquel arrabal,
y que, pese a quien pese, y aunque así no lo quieras,
lo que el tiempo se lleva no volverá jamás.


Emilio García del Nido.
20-julio-2.007 .

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

VOLVER