Aún siendo una mentira yo lo creo
si tu mentira es bella
si me trae el sabor de aquel licor
de tan dulce sabor que yo probé,
si me vuelve a nacer esa ilusión
que hace tanto no tengo.
Si renueva la luz de mi candil
y esplendoroso brilla
bendita la mentira, ni dudarlo,
será el amanecer de un nuevo día
y volveré a soñar
que aún puedo ser mujer
y en mi sueño estará, no lo he olvidado
esa rosa fragante que yo fui...
Sofía Martinez-Avellaneda
30 de septiembre de 2007.