NO LE VINO A DON QUIJOTE
No le vino a Don Quijote
muy bien el andar de andanzas;
por más que ganó alabanzas,
de desdichas fue un azote.
Mejor le hubiera valido
no ser caballero andante,
ni cabalgar desvalido
a lomos de Rocinante.
Pues sólo palos obtuvo
de tanta y tanta aventura,
llevó palos por un tubo
por no tener más cordura.
Lo mismo a mí me ha pasado
por actuar de tal guisa.
Fue mi Destino malvado
quien me dejó sin camisa.
Se puede sacar de aquesto
una sabia moraleja:
Más vale no andar tan presto
y conservar la pelleja.
Francisco Escobar Bravo
14 de febrero de 2008